Como contribución al debate del marco de desarrollo post-2015, nosotros, las organizaciones inspiradas en la Iglesia católica reafirmamos que la ruta más efectiva para superar la pobreza y la actual crisis económica mundial se encuentra estrechamente conectada con la fomento del trabajo decente y el apoyo a la protección social adecuada. Por tanto, afirmamos con seguridad que «el trabajo humano es una llave, probablemente la clave esencial, para toda cuestión social, si intentamos ver realmente esa cuestión desde el punto de vista del bien del hombre».

Esta declaración fue preparada por un Grupo de Trabajo con representación de las siguientes organizaciones inspiradas en la Iglesia católica: Caritas Internationalis, Kolping International/Comisión Alemana de Justicia y Paz, Movimiento Mundial de Trabajadores Cristianos (MMTC-WMCW-WBCA), Unión Internacional Cristiana de Dirigentes de Empresa (UNIAPAC), Coordinación Internacional de la Juventud Obrera Cristiana (CIJOC – ICYCW), Pax Romana y sus miembros afiliados (SIIAEC), Comisión Católica Internacional de Migración (CCIM), Juventud Obrera Cristiana Internacional (IYCW-JOCI), Misión Permanente de Observación de la Santa Sede ante la ONU y otra organización internacional en Ginebra, Pontificio Consejo de Justicia y Paz.