(Antoine Sondag)

1.La  Encíclica constituye una etapa nueva en el pensamiento social de la Iglesia. No es una encíclica sobre el cambio climático, sobre el medio ambiente o la ecología en el sentido estrecho del término;  es un documento que toma su lugar en la serie de la Rerum Novarum (1891 sobre la industrialización y la miseria obrera), de la Quadragesimmo anno (1931, sobre el orden social y las subsidiaridad), de la Pacem in Terris (1963, la paz entre las naciones), de la Populorum Progressio (1967, sobre el desarrollo de los pueblos pobres), de la Centesimus Annus (1991, la crítica al neoliberalismo y la necesidad de una ética en materia económica y política);  esta encíclica … Laudato si” o “Alabado seas”, hace una mirada crítica sobre la evolución de las sociedades globalizadas, sobre el neoliberalismo triunfante y sobre la creencia ingenua en las virtudes del mercado y el progreso técnico.

 2. Laudato si es una llamada a una revolución ecológica, un cambio de paradigma según las palabras de la encíclica. Es decir un cambio en nuestra manera de pensar, de nuestra mirada. Un paradigma, es el conjunto de experiencias, de creencias y de valores que influye en la manera por medio de la cual una sociedad percibe la realidad, reacciona y construye el futuro.

3. Este paradigma -la ecología integral- no entra en competencia con paradigmas científicos (el estado de la ciencia actual) o políticos (conservatismo, liberalismo, socialdemocracia…).« La Iglesia no tiene la pretensión de juzgar sobre cuestiones científicas ni de  sustituir a la política, pero yo invito a un debate honesto y transparente… Por el bien común” (188).. Este nuevo paradigma nuevo es un pensamiento crítico con relación a las evidencias del sentido común y una solicitud activa (el cuidado, care en inglés, por la casa común, según  el subtítulo de la encíclica), un cuidado del planeta para las generaciones actuales y futuras.

4. Este nuevo paradigma requiere construir nuevos modelos de desarrollo, definir de manera nueva el progreso. “«No es suficiente con conciliar en su justo medio la protección de la naturaleza y la ganancia financiera… Se trata de redefinir el progreso” (194). Este progreso se confunde con el crecimiento, con la acumulación de riquezas materiales, con el aumento del PIB… El verdadero progreso consiste en aumentar la calidad de vida; he aquí un vasto campo de investigación  abierto: como definir la calidad de vida?, Cómo medirla?, Cómo hacerla crecer?etc.

5. Los conocedores del pensamiento social de la Iglesia no identificarán acentos totalmente nuevos en esta encíclica. La novedad es la síntesis de elementos ya conocidos re situados en una potente reflexión global. El Papa Francisco llama a abandonar las lógicas de dominación, de derroche, de explotación, de depredación, las culturas del desperdicio… y a acoger la lógica del don, de la belleza, de la calidad de vida, de la espiritualidad… retoma la enseñanza de sus predecesores sobre la relación estrecha entre los pobres y la fragilidad del planeta, los pobres primeras víctimas del cambio climático; la crítica de la tecnología, la crítica de la fe ingenua en las virtudes del mercado que pretenden tener ellas solas la solución a nuestros problemas colectivos; la invitación a buscar otras maneras de comprender la economía y el progreso, la dignidad de cada ser humano, la necesidad de debates sinceros y honestos en los cuales se den lugar a todas las partes implicadas, sobre todo a los más pobres y a los menos  representados,   la responsabilidad de la política internacional pero también la local, el vínculo entre cambio de políticas públicas y modificaciones de modos de vida, la contribución de la educación y la espiritualidad…

6. Algunos puntos sobresalientes de esta encíclica.

6.1. Crisis ecológica y crisis social no hacen más que una sola crisis. “No hay dos crisis separadas la una del medio ambiente y la otra social, sino una sola y compleja crisis socio-medioambiental… Es necesario un acercamiento integral para combatir la pobreza y devolver la dignidad a los excluidos y simultáneamente para preservar la naturaleza” (139).

6.2. Contra el mesianismo de la técnica en el mercado: “La tecnología y su desarrollo (se han convertido) en un paradigma homogéneo y unidimensional… La idea de un crecimiento infinito o ilimitado ha entusiasmado muchos economistas, financistas y tecnólogos… La economía actual y la tecnología no resolverán el problema ambiental…el   mercado no garantiza por sí mismo el desarrollo humano integral ni la inclusión social…” (& 106-108-109). Una nueva educación debe enfocarse a “una crítica de los mitos de la modernidad: individualismo, progreso indefinido, competencia, consumismo,  mercado sin reglas” (&210)

6.3. Para una regulación de la economía “el principio de las máximas ganancias o el maximalismo de las ganancias… es una distorsión conceptual de la economía… No se puede justificar una economía sin política que sería incapaz de promover otra lógica… la lógica que no permite tener una preocupación sincera por el medio ambiente es la misma que impide alimentar la preocupación por integrar  los más frágiles…” (& 195-196).« El medio ambiente es parte de esos bienes que los mecanismos del mercado no están en capacidad de defender o de  promover de manera adecuada. » (& 190)

6.4. Para la gestión en común de los bienes comunes globales,  “la gestión de los océanos (por ejemplo) es necesario un acuerdo sobre los regímenes de gestión para esos bienes comunes globales…. La maduración de instituciones internacionales se hace indispensable, ….más fuertes… eficazmente organizadas… una verdadera autoridad política mundial » (&174-175).

6.5. Para un cambio de los modos de vida “el paradigma de la eficacia de la tecnocracia… lleva a una cultura consumista que da prioridad al corto término y al interés privado…” (&189 et 184). «el consumismo compulsivo… y obsesivo y el reflejo subjetivo del paradigma técnico económico » (& 203).

7. Un la encíclica es un ejercicio práctico de colegialidad para la Iglesia Católica. 14 conferencias episcopales son citadas no la francesa, si el CELAM (Consejo episcopal latinoamericano)  y la FABC (Federación de conferencias de los obispos asiáticos).

8. La encíclica es un ejercicio práctico de ecumenismo .. « .: Quisiera recoger el aporte del querido patriarca ecuménico Bartolomé  » (&7). Esta es la primera vez en una encíclica que un creyente no católico es citado como fuente de pensée del pensamiento de la Iglesia. El Papa resume el pensamiento de Bartolomé como fuente de inspiración (& 8-9).

9. La encíclica hace un llamado al diálogo: 9.1.  Al diálogo entre cristianos. Ver sobre el ecumenismo en el punto ocho (8).9.2.Al diálogo con los científicos y los políticos y al diálogo entre ellos. 9.3. La encíclica cita autores profanos (lo que es muy raro en las encíclicas) el filósofo Ricoeur y sobre todo el teólogo alemán Guardini . Scannone, argentino tiene derecho a una citación!. El pensamiento sobre la técnica es fundado sobre Guardini y no sobre Ellul ! un místico musulmán sufí es citado en nota, Ali al-Khawwas (& 233). 9.4. Diálogo con las “personas implicadas o concernidas”, es decir sobre todo los más pobres o demunidos, los habitantes afectados por los proyectos de “desarrollo”. El Papa está preocupado porque todas las partes implicadas tengan derecho a un capítulo, sobre todo en los países donde el mal gobierno y la corrupción son un obstáculo para los procesos democráticos.